#ElDato: Vincenzo Iaquinta se consagró campeón del Mundo en el Alemania 2006. El delantero jugó 187 minutos en el torneo y marcó un solo gol (a Senegal en fase de grupos).
La vida del delantero italiano Vicenzo Iaquinta ha estado entre las canchas y la ilegalidad, pues desde el 2015 se le ha vinculado con la Ndrangheta, una de las bandas criminales más conocidas del país y de la cual su padre, Giuseppe es afiliado.
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El fútbol y la mafia, por algún motivo siempre coinciden. Hace unos días salió la noticia que Pepe Reina estaría involucrado con la mafia napolitana y hoy, se ha confirmado que Vicenzo Iaquinta ex Juventus y campeón del Mundo en el 2006, podría ir a la cárcel por seis años.
De acuerdo a la Gazzetta Dello Sport la justicia italiana encontró que el delantero, ya retirado, estaba implicado, presuntamente, en crímenes de la Ndrangheta. Iaquinta es acusado de intermediar en la venta ilegal de armas con el agravante de haber participado en negociaciones con los mafiosos.
La justicia italiana también pide 19 años de prisión para su padre, Giuseppe, por estar afiliado a dicha agrupación y seis para Vicenzo. Esto hace parte del proceso que inició la fiscalía contra el clan del jefe mafioso Nicolino Grande Aracri (llamado «operación Aemilia») que incluye hasta 147 imputados.
Pero Vicenzo no es el único que ha estado involucrado con la mafia italiana, la cosa va desde los presidentes de los clubes hasta los mismos jugadores. Desde Berlusconi (Milán), Aurelio de Laurentiis (Napoli) y Moratti (Inter), hasta Fabrizio Miccoli, Maradona y Cannavaro han tenido sus «negocios» con la Camorra.