Estuvo al borde de la muerte y hoy es uno de los mejores del mundo

#ElDato: El historial de traspasos empezó con el Groningen luego pasó al Celtic, luego al Southampton y desde enero del 2018 es uno de los jugadores más importantes del Liverpool.

Antes de ser reconocido como uno de los mejores defensores del mundo, el futbolista estuvo muy cerca de retirarse por una infección que casi le cobra la vida. Esta es la historia.

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Virgil van Dijk, antes de ser el defensor más costoso del mundo y una super estrella del balompié internacional, pasó por una situación de salud gravísima por allá en el 2012.

Por aquel entonces el holandés jugaba en el Groningen sufrió un ataque de salud el cual no fue bien atendida y por nada le cobra la vida. Tras un partido de la Eredivisie el jugador se enfermó y los médicos del club pensaron que era algo leve por lo que lo enviaron a reposar a casa.

Su madre preocupada lo fue a visitar y al verlo tan mal decidió cambiarlo de hospital en el que terminaron descubriendo que Van Dijk tenía apendicitis, peritonitis y una infección en uno de sus riñones.

Estaba tan mal de saluda que el propio jugador había dedicido firmar un testamento en caso de que no sobreviviera. En el testamento dejó todas sus pertenencias a sus madre.

«Si me moría, todo el dinero iría a mi madre, no había dudas, pero tenía que firmar los papeles, lo peor podría suceder en cualquier momento», recordó Virgil en una entrevista

Tras una cirugía, se recuperó durante los últimos dos meses de la temporada 2011/2012 y volvió a ser el futbolista potente que era antes.