En un partido de la segunda división rumana ocurrió un hecho insólito, cuando el técnico del FC Arges, Emil Sandoi le hizo una zancadilla sobre la línea lateral de cal a un jugador del Chindia Targoviste con la intención de frenar el ataque.
Posteriormente, Sandoi se disculpó con el jugador al que había derribado, pero el árbitro no tuvo reparos en expulsarlo por tan fea acción.
When a manager gets sent off for a FOUL on a player. Fabulous Romania strikes again. Just amazing. pic.twitter.com/Xs0jNOSC0U
— Emanuel Roşu (@Emishor) August 25, 2018