Jermain Defoe marcó un golazo de otro planeta que significó el triunfo por la mínima de su equipo el Sunderland ante el Newcastle. Tanta fue su emoción que lloró de la alegría.
Jermain Defoe marcó un golazo de otro planeta que significó el triunfo por la mínima de su equipo el Sunderland ante el Newcastle. Tanta fue su emoción que lloró de la alegría.