La efectividad fue el principal aliado del Porto que nunca encontró su juego. El Nápoles desde el comienzo buscó el arco rival y creó varias oportunidades pero sólo concretó un gol que lo clasificaba.
El partido fue dominado por el conjunto napolitano que vio como los visitantes se dedicaron a defender el 1-0 que habían conseguido en Portugal.
Las opciones en el primer tiempo estuvieron siempre del lado local. El conjunto dirigido por Rafa Benítez creó en la primera mitad 5 remates directos a puerta y el gol de Pandev.
Los ´dragones’ no remataron a puerta en la primera parte. Sin embargo, en la segunda mitad los visitantes salieron decididos a liquidar la serie partiendo de la efectividad.
Llegaron dos veces y las dos fueron gol. Primero por intermedio de Ghilas, hombre recién ingresado, para determinar el empate momentáneo.
Minutos después, el histórico Quaresma anotó un golazo tras una jugada individual.
Faltando poco para el final y para no perder en casa, Duvan Zapata anotó el empate final 2-2 que deja al Nápoles por fuera y al Porto todavía en carrera.