Barcelona se dio un festín en el trofeo Joan Gamper jugado en el Camp Nou frente a un irreconocible Santos. Los catalanes se dieron el lujo de ver un equipo lleno de figuras que ratifican el buen fútbol proclamado desde hace años en el Barca.
La gran figura fue Alexis Sánchez que se reencuentra otra vez con el juego que lo hizo llegar al club blaugrana. La pasividad del Santos en marca, la poca tenencia de balón y el pelotazo, hicieron del partido un entrenamiento más catalán.
Los brasileros en ningún momento crearon peligro y poco exigieron primero a Víctor Valdes y luego a Pinto. Para la segunda mitad saltó Neymar al campo y por fin se le vio jugar frente a Messi.
El argentino y el brasilero dieron muestra de lo que pueden hacer en la temporada que viene con buen juego, asociaciones rápidas, a un toque y también con lujos de categoría.
Los goles no vale la pena repasarlos, simplemente la goleada final si fue un reflejo de lo que se vio en el partido. Por el momento Tata Martino, que fue presentado en sociedad, no cambió nada del equipo.