#ElDato: Santi Cazorla hizo parte de la selección española campeona de la Eurocopa de 2008 y 2012. en el 2007, recibió el premio Don Balón como el mejor jugador de la primera división española…
Se acuerdan de Santi Cazorla? Hace cuánto no lo ven? El exquisito mediocampista español ha vivido un calvario en los dos últimos años que nadie se había podido imaginar… Una serie de operaciones, infecciones y momentos difíciles que casi acaban con su carrera y con su pierna.
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El diario ‘Marca’ se acordó de Cazorla quien trabaja en su recuperación para volver a final de año. El jugador del Arsenal quizá no está en la memoria inmediata de muchos porque en la temporada 2015/2016 tan sólo jugó 18 partidos con los ‘gunners’ y, en la temporada 2016/2017, jugó apenas 7 encuentros. CLARO, ESTA TEMPORADA NO HA DISPUTADO NI UN MINUTO.
Todo empezó el 10 de septiembre de 2013 cuando España enfrentó a Chile en un partido amistoso en el que Cazorla se retiró lesionado por un golpe en su tobillo pues tuvo una fisura en el hueso. Desde ese entonces, un sin fin de operaciones, fisioterapias y ejercicios, no han sido suficientes para su regreso en pleno nivel pues siempre existía dolor. «Las primeras partes las aguantaba un poco mejor, si entraba en calor podía jugar, pero en el descanso, en cuanto me enfriaba un poco, se me saltaban las lágrimas», confesó el jugador de 32 años.
Jugaba a medias y el 5 de diciembre de 2015 sufrió una rotura de ligamento externo en la rodilla izquierda…ahí, se descubre que sus problemas en el tobillo persisten. En ese momento, empezó el peor calvario para Cazorla pues nunca imaginó que aquel problema de tobillo sería tan grave… el tobillo estaba al punto de la gangrena y explica: «Por entonces seguía jugando, me decían que estaba bien. El problema es que no cicatrizaba y las heridas volvían a abrirse, se infectaban… Mira, en esta foto se me ve hasta el tendón».
«Si consigues volver a caminar con tu hijo por el jardín, date por satisfecho, me dijeron», le llegaron a decir en Inglaterra los médicos.
El pasado mayo y después de agotar todos los recursos en Inglaterra sin encontrar solución, Mikel Sánchez en Vitoria (España), le dijo que «tenía una infección tremenda, que me había dañado parte del hueso calcáneo y comido el tendón de Aquiles, ¡me faltaban 8 centímetros!». Esas infecciones, que no fueron tratadas y que no le permitieron nunca mejorar, pudieron terminar con su carrera y de no ser tratada, con su pierna.
Su recuperación la hace en España donde ha vivido anécdotas pos causa de su ausencia en las canchas. «Mi familia sigue en Londres porque mis hijos empezaron allí el colegio. Estar aquí solo sin ellos es lo más duro…El otro día una señora me decía que me parecía a Cazorla, le expliqué que era yo pero no me creía». Además, reconoce sus amistades y apoyo…«Ahora me doy cuenta de quién es quién. Casi cada día recibo un mensaje de Iniesta, Silva, Villa…».
Luego de varias operaciones, de horas de fisioterapias, de haber controlado la infección, dos años de dolor y trabajo intenso, Cazorla ve una luz de esperanza. «No tengo ficha hasta enero, pero voy a volver para entonces», explica el mediocampista que tiene contrato con el Arsenal hasta mitad del 2018.
