#ElDato: Barcelona tuvo el 70 % de posesión y el Milan tan sólo el 30%.
EL partido más atractivo de la jornada cumplió las expectativas pues se vio gran nivel de todos los jugadores y aunque las opciones de gol no llegaron en cantidad, el buen juego y trato de la pelota hizo las veces del gol.
Dos errores en defensa marcaron el empate pues derivaron en los dos goles del encuentro. El primer gol fue un error de Mascherano que aprovechó muy bien Robinho que, con gran visión, habilitó a Kaká para una pared precisa.
El gol de los locales a los 9 minutos permitió al Milan resguardarse en su propio campo a la espera de un contra golpe. Aunque muy pocas oportunidades se presentaron en ataque, el juego en defensa de todos los ‘rossoneros’ fue impresionante.
De Jong, Montolivo y Kaká recuperaron todos los balones posibles y evitaron la generación de juego de Xavi e Iniesta. Los culés se dedicaron a manejar el balón con tranquilidad de un lado para otro.
El único que probó a puerta en repetidas ocasiones fue Neymar pero ningún disparo con fortuna. La presión del Milan se ejerció cuando los rivales pasaban la mitad de la cancha y por momento en el área rival.
Sin embargo, con el Barcelona un error se paga caro. Fue el caso de Christian Zapata que en una mala salida dejó mal parada a la defensa y el Barca aprovechó. Y quién más sino Messi.
El argentino definió con sangre fría ante la marca apática de los defensas locales que no quisieron cometer penal.
El partido todo fue del Barcelona con Mascherano seguro en el fondo tras el error del gol y también una gran defensa milanista.
Los errores en defensa se convirtieron después en seguridad haciendo pasar de villanos a héroes.