Luto en el fútbol mundial: muere Albert Ebossé

Encontrarse con éstas noticias es la parte oscura del periodismo. Un lado que no tiene cabida en el mundo del deporte. El fútbol debería regalar alegrías, sonrisas y no, como el día de hoy, lágrimas y sentimiento de abatimiento.

Un nuevo caso de violencia en el fútbol deja una víctima mortal. Albert Ebossé, jugador camerunés de 24 años murió a causa de una piedra lanzada por sus propios hinchas.

Ebossé disputó su último partido con el JS Kabylie, de la liga argelina, en el que anotó un gol en la derrota de su equipo por 2-1. La afición empezó a lanzar objetos a los jugadores y la piedra que impactó al jugador, ocasionó un trauma craneoencefálico que, minutos más tarde, le provocó la muerte cuando era trasladado al hospital de la ciudad.

Pero la tragedia, que ya es absurda, aumenta en dramatismo. El jugador fue padre ese mismo día y como muestra de amor y deportividad, acudió al partido que sólo le devolvió, con la mayor ingratitud, la muerte.

Inexplicable la situación y aún más inexplicable, las razones que le tendrá que dar la madre a ese hijo recién nacido al que el fútbol le quitó a su padre.

Sólo queda esperar que la justicia llegue y sobre todo, que aprendamos a respetar el fútbol y sobre todas las cosas, la vida de un ser humano que sólo cumplía con su profesión.

El Ministerio del Interior y la Administración Local comunicaron oficialmente que  se abrirá “una investigación sobre las circunstancias de la muerte de Albert Ebossé”.

Paz para el máximo goleador de su equipo y de la liga argelina, Albert Ebossé. FUERZA PARA SU FAMILIA Y ALLEGADOS.