Boca debía asumir un compromiso más en la Bombonera por el Torneo Final de la Argentina, el mítico estadio no había sido aliado xeneize en los últimos encuentros; en esta ocasión su rival seria Argentinos Juniors, equipo donde iniciaba su segundo ciclo como entrenador Ricardo Caruso Lombardi.
El juego empezó de ida y vuelta, el equipo de Caruso no parecía sentirse intimidado por los dirigidos por Bianchi y les jugaba de igual a igual. A los 11 minutos llegaría la alegría para los locales, pues Santiago Silva anotaría desde el manchón penal el 1-0 tempranero que les daba alguna tranquilidad a los xeneizes.
Después de la anotación de Boca, Argentinos no se echó a la pena y se convirtió en el dominador de las acciones frente a un conjunto local que se veía desordenado. El esfuerzo del conjunto de La Paternal rendiría sus frutos en el último minuto del primer tiempo, cuando el defensor Matías Martínez aprovechando las libertades que daba la defensa de Boca en un cobro de corner, anotó el 1-1.
En los primeros instantes del segundo tiempo Boca intentó hacerse dueño del partido, pero poco le duró al equipo de Bianchi la energía para lograrlo, por su parte Argentinos se mostraba cada vez más conforme con el punto que estaba obteniendo como visitante, y como es característico en los equipos de Caruso Lombardí, aguantaban el resultado con mucho orden.
Boca tuvo más llegadas que el visitante, sin embargo todas carecían de orden y la precisión necesaria para intimidar la portería de su rival. Los últimos minutos se disputaron con ambos equipos buscando el gol de cualquier manera, sin embargo ninguno lograría aumentar el tanteador.
Aburrido partido que deja a los xeneizes muy lejos del líder Lanús y a Argentinos con un buen sabor de boca teniendo en cuenta el rival y el estadio donde se consiguió el primer punto de la nueva era de Caruso.