#ElDato: Lo que hace menos de una década era un almacén de droga, ahora es un campo de fútbol sobre el agua.
Radamel Falcao García había visitado la ciénaga como embajador de buena voluntad de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. Anunció buscar un acuerdo con la marca de relojes suizos Hublot, para que la construcción de la zona deportiva fuera una realidad.
Realidad que dejó de ser un sueño el viernes pasado, donde los niños de una humilde ciénaga caribeña podrán vibrar con el fútbol. La inauguración terminó en una fiesta, Radamel García- padre de Falcao- asistió en representación de su hijo y por supuesto la pelota se puso a rodar por primera vez. Qué bonito es el fútbol.