Domingo en la tarde, el ambiente ideal para disfrutar de uno de los clásicos más importantes del planeta fútbol. Boca Juniors y River Plate se enfrentarán en el Estadio Alberto J. Armando, mejor conocido como La Bombonera, en la edición 200 (por torneos locales) del Superclásico de Argentina.
Independientemente de la importancia que tiene de por si la victoria en este partido, siempre es importante analizar el entorno del encuentro.
Boca Juniors llega al partido con un gran número de ausencias obligadas dada la mala racha de lesiones de la que viene siendo víctima. Está confirmado que no jugará Juan Román Riquelme este domingo, pero al se le sumarán las ausencias de Cristian Erbes y Leandro Somosa por lesión y de Clemente Rodríguez por suspensión. El resto del equipo podría ser el mismo que afrontó a mitad de semana el encuentro de ida por los octavos de final de la Libertadores, aunque aún no hay nada confirmado y hay muchas dudas con respecto al equipo que va a poner Carlos Bianchi en cancha.
River Plate anunció el regresó del capitán Leonardo Ponzio, quien vuelve después de una lesión que lo margino 3 semanas del equipo. Se prevé que la presencia del colombiano Eder Álvarez Balanta en la titular sea segura, mientras que la duda vuelve a estar en la parte de adelante, donde Ramón Díaz entrenó durante la semana con Funes Mori y Mora como dupla de ataque, aunque podría sorprender con la inclusión de Rodrigo Mora quien es una verdadera bestia negra para los Xeneizes, anotando en todos los clásicos que ha disputado. La otra alternativa adelante podría ser el juvenil Juan Iturbe.
Boca llega en el lugar 18 de la tabla, mientras que River llega al partido en la tercera ubicación y esperando no alejarse del líder Newell’s, razón por la cual el ex jugador e ídolo de River Plate, Enzo Francescoli, declaró en la semana que será más difícil para el millonario, pues tiene más para perder.
Sea cual sea el resultado mañana se paralizara Argentina para presenciar el primer duelo oficial entre Carlos Bianchi y Ramón Díaz en más de 10 años, el clásico 200 por los torneos de la AFA y un partido imperdible que siempre deja cosas para el análisis.