La Europa League tiene algunos equipos que merecerían estar en la Champions por el nivel de juego y los jugadores que poseen. El partido de hoy pronosticaba un excelente encuentro entre el Tottenham y el Inter. Sin embargo, hoy sólo uno fue de Champions.
Desde el primer minuto los dirigidos por Villas-Boas mostraron el hambre de triunfos que muestran en el torneo doméstico. Tanto así, que hicieron ver al Inter como un equipo que no debería estar en competiciones europeas. Los Spurs hicieron todo bien desde el comienzo del encuentro.
El primer gol al minuto 6 pronosticó lo que serían los 84 minutos restantes. Un gran cabezazo de Gareth Bale rompió el celofán del arco nerazzurri y empezaba a dilucidar quien sería la figura. Por supuesto, el hijo prodigio de Gales.
Los ataques constantes por banda, la recuperación de balón gracias a la presión desde campo contrario, los cambios de frente, la precisión en los pases y, por supuesto, el mal partido del Inter, hizo que se convirtiera en el partido perfecto para los locales. Al minuto 18 ya ganaban 2-0 y con un Inter que no se acercaba al arco defendido por Brad Friedel.
Los visitante sólo tuvieron una oportunidad clara con Riki Álvarez pero se fue desviado el disparo, quizá hubiese cambiado el partido. Definir el mejor jugador de la cancha para el Inter es imposible pero se podría decir que el arquero Samir Handanovic evitó una verguenza todavía mayor.
Aaron Lennon y Defoe volvieron locos a los defensas que no supieron cómo detener los constantes ataques blancos. Los laterales, excepcionales al igual que su principal figura, Gareth Bale. Por cierto, éste señor tiene mínimo 3 pulmones porque se comió la cancha.
El tercer gol llegó tras un cobro de esquina y decretó el 3-0 final. Ojo, pudo ser mayor la diferencia.
Ahora al Inter sólo le queda esperar el partido en el Giuseppe Meazza y tratar de revertir el marcador. Aunque parece imposible por el juego mostrado por el Tottenham hoy, es posible por la calidad de jugadores que tiene el equipo de la capital italiana. Además, el Inter es capaz de lo mejor y de lo peor. Será esperar.
