#ElDato Galeano escribió dos libros sobre fútbol: Su majestad, el fútbol y El fútbol a sol y sombra.
Le decimos adiós a un «Fútbol-adicto», tal como él mismo se definió: Eduardo Galeano (1940-2015), un reconocido escritor uruguayo quien falleció en Montevideo a los 74 años tras un cáncer de pulmón.
Galeano se encargó de denunciar la opresión y las injusticias en América Latina, legado que se mantendrá vigente además de su amor por el fútbol y el Nacional de Uruguay.
Algunas de las frases a enmarcar relacionadas al fútbol del eterno Eduardo Galeano:
«En su vida, un hombre puede cambiar de mujer, de partido político o de religión, pero no puede cambiar de equipo de fútbol». EG
«El fútbol es la única religión que no tiene ateos». EG
“Por suerte todavía aparece en las canchas, aunque sea muy de vez en cuando, algún descarado carasucia que se sale del libreto y comete el disparate de gambetear a todo el equipo rival, y al juez, y al público de las tribunas, por el puro goce del cuerpo que se lanza a la prohibida aventura de la libertad”. EG
“También lo llaman portero, guardameta, golero, cancerbero o guardavallas, pero bien podría ser llamado mártir, paganini, penitente o payaso de las bofetadas. Dicen que donde él pisa, nunca más crece el césped. Es uno solo. Está condenado a mirar el partido de lejos. Sin moverse de la meta aguarda a solas, entre los tres palos, su fusilamiento”. EG
«Jugar sin hinchada es como bailar sin música”. EG
«En el fútbol, ritual sublimación de la guerra, once hombres de pantalón corto son la espada del barrio, la ciudad o la nación». EG
«Voy por el mundo sombrero en mano y, en los estadios suplico: Una linda jugadita, por amor de Dios». EG
«El fanático es el hincha en el manicomio». EG
«El fútbol se parece a Dios en la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales». EG
«El niño pobre, en general negro o mulato, encuentra en el fútbol la posibilidad de ascenso social, que no tiene otro juguete que la pelota: la pelota es la única varita mágica en la que puede creer». EG
«Cuando el fútbol dejó de ser un juego y el fútbol profesional necesitó una tecnocracia del orden, nació el director técnico en reemplazo del entrenador. (…) Él cree que el fútbol es una ciencia y la cancha un laboratorio, (…) no sólo le exigen la genialidad de Einstein y la sutileza de Freud, sino también la capacidad milagrera de la Virgen de Lourdes y el aguante de Gandhi.» EG
«El gol es el orgasmo del fútbol». EG