San Martin de San Juan recibía en el estadio 27 de septiembre a un alicaído Boca Juniors, que de la mano de Carlos Bianchi no había logrado aún hacer pie en el torneo local. Los sanjuaninos buscaban la victoria para aprovechar el empate entre Independiente y Unión en la lucha por el descenso.
Los equipos no se habían acomodado en la cancha cuando el colombiano Humberto Osorio abría el marcador para San Martín sorprendiendo a Propios y extraños, tras el gol los locales se adueñaron completamente de las acciones y lo tímidos ataques del Xeneize parecían no preocupar al portero Luis Ardente. A los 20 minutos Jorge Luna agudizaría la crisis de los de Bianchi con el segundo gol de la tarde para San Martín.
Con el 2-0 los visitantes trataron de reaccionar y lograron algunos flojos acercamientos al arco visitante. A los 38 minutos Boca lograría el descuento por medio de Santiago Silva de pena máxima, pero a los 40 el local volvería a poner la casa en orden con el 3-1 por intermedio de Lucas Landa y en el minuto final del primer tiempo conseguiría otra alegría por intermedio de nuevo de Humberto Osorio.
El segundo tiempo Bianchi cambiará la táctica ubicando 3 defensores en lugar de los 4 inicialistas, sin duda buscando remontar el marcador. Sin embargo a 5 minutos del inicio de la segunda mitad, Penco ya estrellaba un Balón en el poste y 4 minutos después de nuevo Humberto Osorio anotaría para poner el ya histórico 5-1 a favor de los locales.
La pesadilla no terminaría para Carlos Bianchi y los suyos, pues su defensa seguía en oferta permitiéndole al minuto 60 al ariete Sebastian Penco anotar el humillante 6-1 a favor de los sanjuaninos.
El partido bajó en intensidad para los últimos minutos del partido pero Boca nunca estuvo cerca de anotar el segundo descuento, el 6-1 definitivo sigue elevando los cuestionamientos al pobre desempeño de los Xeneizes especialmente en la defensa. Para San Martín la victoria ilusiona, pero aún está muy lejos de la salvación.