La selección cafetera vapuleó por 6-0 a su contraparte boliviana, la cual solo pudo resistir con efectividad durante casi exactamente 45 minutos, pues fue precisamente en el cierre de la primera mitad, que Colombia (tras dominar largamente las alternativas del juego) por fin logró la anhelada anotación por intermedio de Miguel Borja, jugador que se convertiría en la figura excluyente del cotejo.
La segunda parte fue un concierto futbolístico de los colombianos, donde al parecer, la selección de Bolivia sólo fue invitada a manera de público, y a 5 minutos de la reanudación, ya veía como el mejor equipo en cancha aumentaba el marcador con un zurdazo del volante Juan Nieto, a gran pase de Quintero. La avalancha de goles colombianos continuaría en los minutos siguientes, pues al 52 y al 57 respectivamente, Borja volvería a romper las redes bolivianas, tras ser asistido primero por Juan Fernando Quintero y luego por Mauricio Cuero, pilares importantes del triunfo tricolor. Después de la cuarta anotación, la selección Colombia siguió dominando pero sin tener tanta contundencia en la zona de definición.
El delantero estrella de la noche, Miguel Borja, fue remplazado en el minuto 69 por John Córdoba, quien arrancaba desde el banco por primera vez en la competencia. En el minuto 75, precisamente el recién ingresado Córdoba, fue el encargado de poner una sonrisa de nuevo en el rostro de los cafeteros con el 5-0. A pesar de notarse un poco inseguro de cara a gol en algunas ocasiones, el mismo Cordoba al 86, puso el definitivo 6-0 aprovechando las enormes fragilidades defensivas de los jugadores bolivianos , quienes no pudieron marcar correctamente las diagonales de los delanteros colombianos a lo largo de los 45 minutos finales.
El 6-0 final fue el justo reflejo de lo vivido en un partido en el que, al parecer, la selección boliviana tiró la toalla después de encajar la primera anotación, Colombia clasifica a la siguiente etapa del torneo a falta de su último partido contra Argentina, partido en el que a la selección local, solo puede ganar y esperar que se le den otros resultados para soñar con una clasificación milagrosa.
