Carta de Katia Aveiro a los HATERS de Cristiano Ronaldo

#ElDato: Cristiano Ronaldo es el actual goleador de la presente edición de la Champions League con 9 anotaciones en 6 partidos. Además, logró ser el primer y único jugador en anotar en todos los encuentros de la fase de grupos. 

El momento de Cristiano Ronaldo en la liga española no es bueno y el del Real Madrid es la fiel prueba de ello. Los malos resultados acompañan al equipo blanco y las críticas llegan hacia el plantel y su principal referente.

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CR7, acostumbrado a marcar, tiene una racha negativa en la que en los últimos 14 partidos ligueros tan sólo ha anotado 4 goles. Por eso, las críticas no se hacen esperar y los haters tiran con todo hacia el luso, sus compañeros y el club blanco.

Muchos aseguran que está en el declive de su carrera deportiva peor no su familia. Katia Aveiro, hermana del delantero, salió a defender a su hermano con una monumental carta que va dedicada a todos sus haters.

CARTA A CR7

“Esto es lo que te quería decir, Cristiano:

Cuando a los doce años llegaste a Lisboa lleno de lágrimas y esperanzas dijeron que sólo eras un niño de Madeira. En menos de cinco años estabas jugando en el primer equipo del Sporting.

Cuando jugaste los primeros partidos con los ‘mayores’, ellos decían que solo eras un pu** habilidoso. Algunos meses después, fichaste por el Manchester United.

Cuando llegaste a Inglaterra, dijeron que sólo eras una promesa. En seis temporadas marcaste 118 goles.

Cuando el Real Madrid te fichó, dijeron que sólo eras un nombre para vender camisetas. Desde 2009, has marcado 422 goles en 418 partidos y ya has logrado prácticamente todos los récords que tenías en el club.

Cuando en 2008 recibiste el primer Balón de Oro, ellos dijeron que solo ganarías ese. Y ya ganaste cuatro más.

Cuando te convertiste en capitán de la selección, dijeron que eras solo un capitán sin carisma, sin espíritu de liderazgo. En 2016 fuiste el primer portugués en levantar la Eurocopa.

Ahora que no has marcado como un extraterrestre en dos o tres partidos, dicen que eres solo otro jugador al final de su carrera, casi acabado, en las últimas, en la curva descendente. No te preocupes. Cuando sonrías con un trofeo en las manos en lo alto de la Torre Eiffel o cuando marques un gol decisivo vas a tenerlos ahí mirando, atentos. A aplaudir, claro. Es lo que les resta”.