Pensar en una final Brasil-España en la Copa Confederaciones de la Fifa no era imposible. El momento de los dos, es evidentemente superior al de sus rivales. En los papeles España tiene la posibilidad más factible que el equipo local.
No desconozco la historia Italiana, cuatro veces campeones del mundo y potencia mundial, pero el presente de la ‘azurra’ no es el mejor y menos, pensando en que tiene que enfrentar al mejor equipo, a nivel de selecciones, del momento.
Italia, la de hoy, carece de una de sus principales fortalezas a nivel histórico: la defensa. El cuarteto posterior presenta muchas falencias, sobretodo los laterales. Por derecha, se lesionó el hombre de marca, Abate. Ese lugar lo ocupó Maggio, un hombre con tintes ofensivos y de escasa marca. Frente a Japón sufrío mucho, Honda y Kagawa hicieron con Maggio un festín. No quise imaginar lo que pueden hacer Iniesta y Jordi Alba. Por izquierda, De Sicglio, sin marca y sin ataque.
En mitad de cancha, es cierto vuelven Pirlo y De Rossi, pero…. Pirlo, lejos, el mejor de Prandelli, no llega al 100% y tendrá que centrarse en un trabajo de rompimiento, más que de creación. Su preoupación, junto a la de De Rossi, será cortar el circuito español, recuperar el balón y buscar el contragolpe. Pero, ¿quién será el referente en ataque? El Sharaawy, seguramente, que no llega en plenitud física y tampoco es un hombre que deslumbre.
Para muchos, España no llega en el mejor momento, de lo que difiero completamente. A Uruguay le dio un ‘baile’ impresionante en la primera parte. Le hizo 10 a Tahití y frente a Nigeria no fue la España avasalladora, e igual ganó 3-0.
La otra semifinal fue más pareja, si bien Brasil es el favorito, Uruguay pudo sorprender. El sector izquierdo de los hombres de Scolari es un sector valdío, nadie lo cuida, nadie lo protege. Es responsabilidad de Marcelo, pobre, nunca está para cumplir con el trabajo de marca, su principal objetivo, antes que atacar.
Dani Alves es más juicioso que Marcelo en marca, pero por momentos se le olvida. De resto, Brasil es un equipo equilibrado. En el doble 5, Paulinho y Luiz Gustavo son muy seguros y adelante, Neymar esta demostrando que puede ser el referente de la selección. Hulk y Fred cumplen, Oscar es intermitente.
Uruguay tiene un ataque letal. Cavani, Forlán y Suárez meten miedo a cualquiera. Lastimosamente no es el mejor momento de los de Tabárez, pero siempre serán peligrosos y ante Brasil, siempre se juegan un partido a parte. Sufrieron en defensa, Godín y Lugano, a veces sí, a veces no.
Nos espera una gran final. Dos campeones mundiales, que suman 9 copas del mundo. Es un banquete para disfrutar.
Un aporte sobre Tahití
Es un equipo amateur que recibió 24 goles en 3 juegos y solo convirtió uno. Sin embargo, el valor deportivo que demostró en cancha es de admirar. Siempre jugó a ras de tierra, buscó siempre salir con el balón en los pies y no se refugió en su terreno. Tiene un jugador profesional y otro que podría serlo, Chong Hue. Con el debido respeto, es más inteligente que muchos jugadores del FPC. Sabe con el balón en los pies y se bien en el frente de ataque.
@hagacu