España recibió a Alemania en un partido que prometía grandes emociones. Los dos últimos campeones del mundo se enfrentaron en tierras ibéricas pero el partido fue decepcionante.
Las opciones fueron escasas en los 90 minutos y ningún equipo pudo refrendar lo que han venido haciendo los últimos años. Si bien España hizo el gasto bajo la lluvia, los alemanes controlaron bien los ataques rivales.
Alemania por bandas intentó encontrar el gol que sólo llegó al minuto 89 gracias a un remate de Kroos y una débil respuesta de Kiko Casilla, el portero del Espanyol.
Un partido muy disputado en la mitad del campo. Un partido muy diferente al que se habría dado hace un par de años. Un partido que fue claramente un amistoso.
La lluvia le puso el único drama al partido. Los dos equipos jugaron con pasividad y con miedo a lesionarse, evitaron el compromiso en algunas jugadas.
