Pep Guardiola recibió una advertencia del presidente de los árbitros de la Bundesliga por las reacciones que tiene el técnico en el banquillo del Bayern Múnich. La acción que causó el ultimátum tras el espectáculo contra el Schalke 04.
El entrenador español corrió 45 metros hasta el juez de línea tras el gol del 1-0 de Robben.
“Si vuelve a salir del área técnica será expulsado. Su emoción superó los límites permitidos. Si un entrenador corre hasta el banderín de córner para protestarle a un asistente, debe de ser expulsado y mandado a la tribuna”, explicó Herbert Fandel.
“El señor Guardiola debería cambiar su actitud inmediatamente”, añadió el presidente de la comisión arbitral.
El árbitro suizo Urs Meier también criticó a Pep. “Parece que a Guardiola se le permite todo por ser un entrenador consagrado. Está socavando la autoridad de los árbitros y los ridiculiza”.