El equipo andaluz derrota 3-2 a un Madrid enchufado en la primera parte y perdido en el complemento en marco de la 17ª jornada de la Liga de las Estrellas.
En un partido para el recuerdo, el equipo que conduce el ingeniero Pellegrini doblegó al Real Madrid en la Rosaleda con doblete del paraguayo Roque Santa Cruz y otro tanto de Isco, en un compromiso interesante por sus distintos performance con dos equipos grandes del balompié español.
Para sorpresa de madridistas y antimadridistas, el luso José Mourinho decidió apostar por Antonio Adán, dejando en el banquillo a una de las insignias de la historia merengue, Iker Casillas.
Así las cosas, el equipo blanco dio un salto al costado en la disputa por la anhelada Liga, quedando a 16 unidades de su máximo rival el Barcelona, tan solo con 17 fechas disputadas, algo insólito e impensable teniendo en cuanta el enorme rendimiento que había obtenido el Madrid la temporada pasada.
Los malagueños llegaron a este partido frustrados a causa de la sanción que le impartió la UEFA en el ámbito deportivo y económico, como consecuencia del retraso en los pagos a funcionarios y jugadores de la entidad del sur de la península, hecho que según la entidad europea los dejará por fuera de cualquier competición continental en las próximas cuatro temporadas.
Al contrario de lo que muchos pensaban, los andaluces salieron al gramado de su estadio con la convicción de hacer el mejor papel para dejar en alto que en la actualidad son uno de los grandes de Europas y asimismo de España. Y lo demostraron con creces.
A pesar de tener en el campo de batalla a un grande como el Madrid, plantearon un partido astuto en los diferentes fragmentos de compromiso, hecho que les valió derrotar a un rival directo en la tabla y de paso reafirmar la confianza que han impregnado desde hace unas temporadas.
Sorprendió a todos la vinculación en la titular de Javier Saviola en cambio de Santa Cruz, la de Francisco Portillo por Manuel Iturra y la de Sergio Sánchez por Welligton, quien estaba sancionado.
El primer tiempo fue todo para la visita. Los de Chamartín manejaron con soltura los tiempos de partido con un Cristiano Ronaldo inspirado, que creó constantes peligro a la zaga rival y colaboró en la creación de juego y en la recuperación de la esférica. Xabi Alonso propuso un juego interesante, haciéndose amor y señor del medio campo y Karim Benzema estuvo siempre atento a resolver a pesar de no contar con una opción clara.
Sobre el minuto 2 de partido, Cristiano ejecutó un disparo impresionante que hizo una extraña curva que logró sacar el argentino Willy Caballero con excelsa categoría.
A los 24, nuevamente el portugués pudo abrir el marcador luego de una prodigiosa jugada con Xabi Alonso y Ángel Di María, que habilitó al extremo con un pase entre líneas, que no pudo resolver con categoría como suele hacerlo en partidos de este estirpe.
Después de esta jugada y otra de Di María, el partido no contó con opciones claras en los dos pórticos defendidos por notables cancerberos.
La segunda manga fue una revolución a lo visto en la primera. Aunque Madird salió con la misma tónica de presionar y tener el dominio en el ecuador de la cancha, el Málaga se despojó de sus miedos para darle pelea de tu a tu a un conjunto que ha perdido el poderío que lo caracterizaba en la campaña anterior.
Apenas a los tres minutos de reanudado el partido, los locales se pusieron por delante en el marcador con una obra de Isco que dejó sin opción alguna a Adán. El “conejo” Saviola ejecutó un cambio de frente al área rival, donde Joaquín mostró toda su calidad para encontrar el momento exacto y habilitar al talentoso Isco, que sin pensarlo dos veces, disparó a ras del piso, cambiando la esférica de dirección venciendo a Antonio Adán.
A partir de ahí el Málaga ahogó a la zaga merengue, contando con otras dos ocasiones de gol en menos de cinco minutos, situación poco común en Liga para la Casa Blanca.
Para fortuna de los madridistas, el turbo se le agotó con prontitud a los blanquiazules, situación que aprovechó con creces la visita para igualar la contienda. En este sentido, los blancos pusieron las cosas 1-1 con una autogol de Sergio Sánchez, después de una jugada prolongada que contó con varios rebotes, donde siempre estuvo presente el centro delantero Karim Benzema.
Parecía que la igualdad caería como baldado de agua fría a los boquerones. Sin embargo los del ingeniero demostraron que están para cosas grandes poniendo las cosas 2-1 sobre los 72′. Jesús Gámez metió un centre mortífero a ras del piso que recayó cerca de las 5.50 sobre el palo izquierdo de Adán, donde Joaquín se anticipó a la defensa para dejar seguir el rumbo de la pelota que finalmente metió al fondo de la red el guaraní Roque Santa Cruz.
Tendrían que pasar solo cuatro minutos, para que los malaguistas pusieran el tercero de su cuenta y de paso sentenciaran el partido. Un contragolpe perfecto recayó en la humanidad de Joaquín, quien emulando sus mejores épocas en el Valencia, galopeó con la redonda, dejando en el camino a dos zagueros para meter un pase letal en el área que Roque aprovechó, para chutar de primera y dejar a Adán sin opción alguna de despejar el balón.
El merengue hizo honor a su historia para meter el de la honrilla a los 81′. Un error de Camacho fue bien agradecido por Ozil que habilitó a Benzema para que el delantero pusiera las cosa 3-2 y de paso los nervios de punta para todos los asistentes a la Rosaleda.
Los últimos instantes de partido fueron de ida y de vuelta, con un Madrid nervioso por empatar. No lo pudo hacer y cayó justamente ante un rival de peso que lo dejó ahora a 16 unidades del Barcelona, prácticamente sin posibilidad alguna de soñar con remontar en la otra parte de campeonato que continuará a partir del próximo 4 de enero de 2013.
Próxima fecha: Real Madrid vs. Real Sociedad- Deportivo de la Coruña Vs. Málaga.
